Con el comienzo del año los profesionales de estética buscamos aparatología que ofrezca a nuestros clientes buenos resultados y queremos contar con una amplia variedad de equipamiento para dar respuesta a sus necesidades.
Antes de hacer una elección, es importante analizar la época en la que nos encontramos y qué van a buscar las personas, de esta manera ajustaremos mejor el éxito de nuestra oferta. Tras las fiestas navideñas, lo que todos buscamos es reducir los excesos de comida y bebida, por ello los tratamientos más demandados serán los reductores o lipolíticos. Ante la amplia gama de equipamiento, nuestra recomendación profesional es la criolipólisis.
Este tratamiento es uno de los últimos en aparecer en escena y desde su inicio muchas celebrities confiaron en él, puesto que se obtienen resultados similares a un tratamiento médico-estético sin necesidad de pasar todo el proceso del post operatorio. Además nace tras numerosos estudios que evidencian la relación entre el frío y la reducción de grasa localizada.
¿Cómo realizar un tratamiento correcto con Criolipólisis?
Como comentábamos anteriormente, vamos a buscar un equipo efectivo que deje satisfechos a nuestros clientes por su acción. Pero es importante recordar que un buen resultado no solo dependerá del equipo que utilicemos, sino de hacer un buen diagnóstico previo, una buena preparación de la zona y, por supuesto, realizar una correcta praxis del equipo.
Para hacer un buen diagnóstico es importante una valoración visual del profesional y la palpación de la zona, aunque es cierto que en muchas ocasiones no es suficiente, ya que un volumen en la zona a tratar puede ser generado por distintas causas: exceso de líquido, grasa, celulitis o flacidez de tejidos. De este modo, sería recomendable disponer siempre de un kit de termografía, que consta de placas de cristal líquido microencapsulado, con el que confirmaremos de qué tipo de acúmulo se trata, dónde se encuentra y el tamaño del mismo.
«Es obligatoria la utilización de membrana anticongelante con la criolipólisis. Proteges la piel y favoreces un óptimo resultado»
Una vez realizado el diagnóstico y sabiendo la situación del cliente, podemos comenzar con la aplicación del equipo. Con la criolipólisis conseguimos destruir el acúmulo de grasa localizado gracias su trabajo hasta -5ºC, que acompañado de una succión controlada, consigue mantener la grasa dentro de la cavidad del manípulo en los 35 – 40 minutos que dura el tratamiento y congela los adipocitos. Posteriormente, el organismo los eliminará de forma progresiva y natural.
Antes de colocar el manípulo en la piel, cabe recordar que ES OBLIGATORIO en este tratamiento la utilización de una membrana con gel anticongelante para proteger la dermis contra el frío extremo y que los resultados sean los esperados.
Como recomendación profesional, es importante trabajar el equipo con dos manípulos simultáneos, así como contar con distintos tamaños que se acoplen a diversas zonas del cuerpo: cartucheras, glúteos, abdomen o flancos, piernas, brazos, espalda… Esto que en principio puede parecer que carece de importancia, te ayudará a realizar un tratamiento completo y reducir el tiempo de trabajo.
Combinación de técnicas: aprovecha al máximo tu aparatología
En estética se pueden realizar infinidad de combinaciones entre equipos para ayudar a que los efectos sean evidentes cuanto antes.
Según tu criterio como profesional al evaluar a tu paciente, antes de aplicar la criolipólisis, puedes trabajar la zona con 1 o 2 sesiones de cavitación o laserlipólisis, para ayudar a romper los adipocitos más resistentes. Por otro lado, al acabar el tratamiento principal o durante el periodo de descanso, puedes realizar sesiones de presoterapia para facilitar al organismo a deshacerse del cúmulo de grasa que la criolipólisis ha fraccionado.
Para reforzar un óptimo resultado, una vez finalizadas todas las sesiones del tratamiento, se recomienda seguir con otros tratamientos estéticos como la vacumterapia (vacuum con sistema de rodillos y radiofrecuencia), que nos ayudará a regenerar los tejidos de la zona tratada, o incluso la mesoterapia virtual junto con principios activos lipolíticos para seguir eliminando los restos de grasa y/o reafirmantes para enriquecer la zona de piel tratada.
En definitiva, la criolipólisis te ayudará a ofrecer a tus clientes un tratamiento completo tras los excesos navideños y ejercerá de preparación para la época estival. Como profesional de estética tienes muchas opciones para conseguir un resultado óptimo, pero recuerda que la decisión siempre debe estar basada en un buen diagnóstico y análisis.