– Camillas sillones eléctricos. La camilla eléctrica de tres motores es una de las más completas del mercado. El cabezal con orificio facial, los reposa-pies y reposa-cabezas extensibles, la regulación de la altura e inclinaciones de los cuerpos mediante un mando o los reposa-brazos desmontables, están presentes entre sus características técnicas. La extensión alcanzada por esta camilla permite que el paciente se sienta cómodo mientras se lleva a cabo el tratamiento o masaje.
– Camillas eléctricas dos cuerpos.La camilla eléctrica de dos cuerpos presenta un orificio facial a través del que el paciente podrá respirar cuando se encuentre boca abajo. La estructura de este modelo está fabricada en tubo de acero y contiene cuatro ruedas para poder desplazarla más fácilmente. Aunque el cabezal es abatible manualmente, la regulación de altura se realiza mediante mando. Por último, es conveniente tener en cuenta que los motores de estos productos cumplen con las normativas de seguridad europeas.
– Camillas eléctricas dos cuerpos tijera. La camilla eléctrica de dos cuerpos con ruedas permite elevar el respaldo hasta una posición de 85º. La regulación de la altura se realiza mediante el mando de mano, hecho que permite que el esteticista pueda incrementar o disminuir la elevación desde cualquier punto de la habitación. Este modelo incluye un nivelador ajustable para evitar los pequeños desniveles. En definitiva, es una de las camillas que cumple con las características idóneas para cualquier esteticista.
– Camillas eléctricas tres cuerpos.La camilla eléctrica de tres cuerpos con portarrollos y tapón facial presenta cuatro niveladores ajustables para evitar los pequeños desniveles. El terapeuta, a través de un motor eléctrico de mando de mano, puede determinar la altura idónea de la camilla, situándose la mínima en 52 y la máxima en 93 centímetros. La opción de portarrollo permite que el esteticista tenga a mano el papel en el caso de que haya que cambiarlo por la presencia de un nuevo cliente.
– Camilla eléctrica articulación central. La camilla eléctrica de tres cuerpos, con articulación central, respaldo y reposapiés reclinables presenta puntos de apoyo para la cabeza en ambos extremos para así lograr la comodidad y el confort del paciente. Una de sus ventajas se encuentra en su extensión: 230 centímetros, lo que permite que una persona de gran estatura pueda disfrutar del tratamiento o masaje en las mejores condiciones posibles. La altura mínima que puede alcanzar la camilla se encuentra en 57 centímetros mientras que la máxima en 98.
– Camillas eléctricas Bobath. Esta camilla eléctrica está especialmente diseñada para los métodos de tratamiento acordes con el Vojta y Bobath. De esta manera, su tapicería y su estructura extremadamente robusta otorgan la posibilidad de que el esteticista realice un tratamiento conveniente. El profesional, para adaptarla a sus necesidades, puede determinar la altura de la camilla a través de un pedal. Por último, su espuma de alta densidad permite que al paciente disfrutar de una auténtica sensación de relajación.