El Dr. Carrasco es especialista en cardiopatías congénitas |
Las cardiopatías congénitas son una de las malformaciones más frecuentes entre la población, y que muchas de ellas se manifiestan ya en recién nacidos. El Doctor José Ignacio Carrasco Moreno ha compartido con Quirumed sus conocimientos sobre el campo médico al que ha dedicado su carrera profesional desde que se licenció en Medicina y Cirugía en la Facultad de Medicina de la Universidad Literaria de Valencia entre 1976 y 1982.Entre 1986 y 1990 se especializó en Pediatría como M.I.R. el Servicio de Pediatría del Hospital General Universitario de Valencia e hizo un rotatorio por las Unidades de Cardiología Pediátrica, Cuidados Intensivos Pediátricos, Neonatología y Cuidados Intensivos Neonatales, del Hospital Infantil La Fe de Valencia.
Ha dedicado su vida laboral a esta parte fundamental de la medicina, y se ha especializado en cardiopatías congénitas hasta tal punto que en la actualidad es Jefe del Servicio de Cardiología Pediátrica y responsable de la Unidad de Hemodinámica Pediátrica del Hospital Infantil La FE de Valencia desde junio de 2006, así como Responsable de la Unidad de Cardiología Pediátrica y del Gabinete de Ecocardiografía Pediátrica y Técnicas invasivas y no invasivas en Cardiología Pediátrica, en el Hospital 9 de Octubre de Valencia desde noviembre de 1999.
Experiencia y profesionalidad que traslada al campo médico español siendo miembro numerario de la Sociedad Española de Cardiología Pediátrica y Cardiopatías Congénitas, y también de la Sociedad Española de Cardiología, de la Sociedad Valenciana de Pediatría, de la Sociedad Valenciana de Cardiología y de la Asociación Española de Pediatría.
Con la ayuda del Dr. Carrasco hoy podemos conocer un poco más a fondo un problema tan importante como las cardiopatías congénitas:
1. ¿Las cardiopatías congénitas son o pueden ser graves para la salud del paciente? ¿Cómo le afectan en general?
Como muestran las estadísticas son una de las malformaciones más frecuentes en el niño, entonces tienen una incidencia bastante alta, 8 de cada 1000 recién nacidos tienen un problema de corazón. Aunque de estos menos de la mitad entrañan gravedad y necesitan tratamiento, pero efectivamente pueden y muchas de ellas son potencialmente graves, incluso algunas hay que tratarlas desde el nacimiento. Algunas de ellas, en un porcentaje bastante alto, sí entrañan gravedad.
2. ¿Qué tipos de cardiopatías son los más usuales entre los niños recién nacidos?
Podríamos distinguir entre cardiopatías frecuentes y cardiopatías con impacto neonatal, cardiopatías que den problemas ya en el niño cuando nace. Por estadística, las cardiopatías más frecuentes son las banales, y esto no entra en las estadística de 8 por mil, sino que son niños que nacen con pequeños defectos de corazón, en los tabiques tanto auricular como interventricular, y muchos de ellos se corrigen espontáneamente.
Luego están otras cardiopatías que pueden ser leves que no necesitan tratamiento desde el nacimiento, como estenosis de válvulas, ligeras, pequeños defectos a nivel de las grandes arterias o los tabiques del corazón.
Y luego hay otras cardiopatías, que potencialmente representan riesgo para el paciente, como puede ser la estenosis de la válvula aórtica, o de la válvula pulmonar, que pueden ser muy severas, incluso a veces nacen los niños con las válvulas cerradas, con los tabiques comunicados, con los vasos cambiados de sitio. Una de las cardiopatías frecuentes que da problemas desde el nacimiento es la transposición de grandes vasos, la aorta nace cambiada con la pulmonar.
Entonces hay desde cardiopatías que son frecuentes y no dan problemas hasta las menos frecuentes pero que sí que son las que dan problemas, ya en el recién nacido.
3. ¿Como trabajan en la unidad de cardiología de La Fe cuando detectan un nuevo caso de cardiopatía congénita en recién nacidos?
Muchos niños nacen ya diagnosticados en los controles del embarazo, gracias a la realización de ecocardiografías fetales, que en nuestro hospital efectuamos los cardiólogos infantiles en colaboración con los ginecólogos. Esto ha supuesto una mejora en los cuidados y en los resultados del tratamiento de los recién nacidos con cardiopatías congénitas, ya que el conocimiento preciso de su problema antes de nacer, hace que pueda ser ingresado y tratado inmediatamente tras el parto por los equipos de cardiología pediátrica y cirugía cardiovascular. Y también hace que podamos planear con obstetras y neonatologos la mejor forma y el momento del parto, así como los controles posteriores.
En las cardiopatías congénitas están involucrados muchos profesionales, que tienen que coordinarse en los que llamamos “un enfoque multidisciplinar”, en el que intervienen además de cardiólogos y cirujanos, obstetras, neonatólogos, pediatras e intensivistas, y también médicos de otras especialidades en problemas puntuales.4. Una vez que se han sometido a cirugía o tratamiento, ¿pueden hacer vida normal? ¿o tienen que tener cuidados especiales?
La idea con la que trabajamos es que todos los pacientes lleven una vida lo más normal posible. Sin embargo, eso desgraciadamente no se puede conseguir en todos. En estos casos sí que tienen que tener cuidados. Incluso en los defectos simples, los niños que tienen cirugía o que llevan cicatrices les aconsejamos que tengan cuidado toda la vida. Aunque prácticamente su calidad de vida y supervivencia, sea como la de la población en general, no quiere decir que no deban de recibir cuidados.
Y luego, están las cardiopatías más graves, que pueden incluso asociar la falta de alguna cavidad del corazón, estas no se pueden reparar de forma completa para conseguir un funcionamiento normal del corazón. Estas necesitan muchos más cuidados por supuesto.
Quirumed contribuyó con la asociación Menudos Corazones en una campaña de concienciación sobre los graves problemas de las cardiopatías congénitas |
Pero el principal avance, como comenté antes, lo supuso la ecografía, porque da mucha información anatómica y funcional del corazón, y porque es una técnica no invasiva que se puede repetir las veces que quieras. Otras técnicas como el cateterismo necesita de anestesia, pero la ecografía no. Puedes obtener una información muy precisa, en la mayoría de los casos, sin riesgo y sin daño al paciente porque no supone radiación tampoco.
6. También me ha llamado la atención que decía usted en el artículo que ha descendido la mortalidad en pacientes intervenidos y que por ello hay más pacientes adultos con cardiopatías congénitas. ¿La esperanza de vida de estos adultos llega a igualarse con la de una persona sin la enfermedad?
Hay cardiopatías y cardiopatías. Hay un volumen importante de pacientes con cardiopatías congénitas intervenidas, en los que la esperanza de vida es muy similar a la de la población general. Aunque hay otras cardiopatías que desafortunadamente no es así y pueden acabar en trasplantes cardíacos como son la cardiopatías que llamamos tipo corazón univentricular, es decir, que nos falta uno de los dos ventrículos para funcionar. Son mucho más complejas, porque no conseguimos devolver la anatomía normal, lo que sí que hacemos son técnicas paliativas para que el enfermo pueda tener una cierta calidad de vida. Lógicamente no van a ser atletas de competición, la idea es que puedan hacer una vida normal e incluso deportes de una forma ligera.
Como se ha avanzado tanto en el tratamiento de las cardiopatías en niños, ahora conseguimos que muchos de ellos lleguen a la edad adulta. Y en La Fe tenemos una unidad de referencia a nivel nacional que se encarga de seguir el tratamiento de esos pacientes que cuando llegan a la adolescencia, y les tenemos que dar de alta de la unidad infantil. Es la Unidad de Cardiopatías Congénitas del adulto, con cuyos médicos trabajamos muy estrechamente los cardiólogos infantiles. De hecho compartimos conocimientos y realizamos sesiones conjuntas, de tal modo que cuando los niños con enfermedades más complejas crecen y pasan a la UCCA, sus médicos ya conocen a muchos de ellos por aquellas sesiones.
7. La Fe ya tiene 40 años de experiencia en tratamientos de este tipo. Y como profesional médico ¿cree que además de tratar a los pacientes los padres también requieren ayuda o apoyo psicológico cuando se enteran de la noticia?
El cerebro de los humanos es muy complejo y cada uno afronta la enfermedad y los problemas de una forma. Nosotros aquí en La Fe, en las unidades más graves como oncología y neonatología, y ahora también en cardiología infantil, tenemos psicólogos que ayudan a padres y responsables de los pacientes ingresados.
Y también, desde hace poco recibimos la ayuda de una Asociación (Latiendo Juntos), cuyos profesionales y voluntarios, entre los que se encuentran psicólogos, trabajan estrechamente con nosotros los cardiólogos, ayudando a pacientes crónicos hospitalizados, niños con problemas graves y a sus familiares a sobrellevar un poco los problemas hasta que se adaptan.